sábado, 30 de agosto de 2014

Harissa

Para los amantes del picante, como Hugo y yo, siempre mola descubrir nuevos sabores. Esta salsa es típica de los países del norte de África y es una pasta picante y especiada de lo más deliciosa. Sirve para acompañar cualquier plato dándole ese toque picante además de añadir su peculiar sabor. ¡Os la recomiendo!
 
La receta la he sacado de esta web y la he hecho al pie de la letra. Ha quedado perfecta.





Ingredientes:

- 12 guindillas secas
- 3 dientes de ajo
- 1/2 cucharadita de sal
- 2 cucharadas de aceite de oliva vírgen
- 1 cucharadita de semillas de cilantro molidas
- 1 cucharadita de semillas de alcaravea molidas
- 1/2 cucharadita de cominos molidos

Preparación:

Remojar las guindillas con agua hirviendo durante media hora hasta que estén blanditas. Escurrir y retirar las semillas y los rabitos (yo he dejado parte de las semillas para que fuera algo más picante, porque no eran muy fuertes).

Colocar todos los ingredientes en un vaso de batidora y batir hasta conseguir una pasta suave y homogénea. Volcar en un tarro y cubrir con aceite para que no se seque. Dura alrededor de una semana en la nevera.

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